miércoles, 25 de noviembre de 2009

ALFNSINA STORNI - LA INVITACION AMABLE


Acércate, poeta; mi alma es sobria,
de amor no entiende -del amor terreno-
su amor es mas altivo y es mas bueno.

No pediré los besos de tus labios.
No beberé en tu vaso de cristal,
el vaso es frágil y ama lo inmortal.

Acércate, poeta sin recelos...
ofréndame la gracia de tus manos,
no habrá en mi antojo pensamientos vanos.

¿Quieres ir a los bosques con un libro,
un libro suave de belleza lleno?...
Leer podremos algún trozo ameno.

Pondré en la voz la religión de tu alma,
religión de piedad y de armonía
que hermana en todo con la cuita mía.

Te pediré me cuentes tus amores
y alguna historia que por ser añeja
nos dé el perfume de una rosa vieja.

Yo no diré nada de mi misma
porque no tengo flores perfumadas
que pudieran así ser historiadas.

El cofre y una urna de mis sueños idos
no se ha de abrir, cesando su letargo,
para mostrarte el contenido amargo.

Todo lo haré buscando tu alegría
y seré para ti tan bondadosa
como el perfume de la vieja rosa.

¿La invitación esta... sincera y noble.
Quieres ser mi poeta buen amigo
y sólo tu dolor partir conmigo?

SAVITRI DEVI

lunes, 16 de noviembre de 2009

Extracto de leyendas chilenas "La creación"


"-En el comienzo de los tiempos- hababa la Machi con voz profunda mientras sus manos seguían agoreras el ritmo de sus palabras- nada existía en la Tierra, tan sólo el Vacío. Un espíritu poderoso habitaba en el aire junto a otros, que le debían obediencia. De pronto, estos se rebelaron contra el Gran Espíritu quien siendo su Creador tenía el Gran Poder. En castigo los convirtió en montañas y volcanes. Mas, a aquellos que se arrepentían de veras los transformó en estrellas. Pero la tierra estaba triste y desolada y tanto gemía por ello, que el Gran Espíritu convirtió en hombre a su único hijo, enviándolo a la tierra. La madre de este hijo sintió una pena inmensa y, para poder mirarlo abrió en el cielo una ventanita y desde allí seguía sus pasos. Mas viendo a su hijo tan solo, en esta fea tierra, rogó al padre que le diera una esposa. El Gran Espíritu cgió entonces una estrella; la convirtió en mujer y la envió a la Tierra para que acompañara al hombre..."

Extracto de leyendas Chilenas "El Fin de los fortines"


En tanto, el extraño personaje siguió caminando, pasando de uno a otro fortín repitiéndose la misma historia; o sea, dejando a su paso a los españoles sumindos en un profundo sueño.

Los mapuches, siempre espiando a sus enemigos, se extrañaron al no escuchar clarines ni voces de mando; cautamente se aventuraron a entrar en los fuertes: los españoles todos, tendidos en el suelo, dormían profundamente

Luego celebaron grandes machitunes en honor de su dios. Porque solo un dios protector bajo laforma de aquel ser de largos cabellos, pudo hacer lo que había hecho, viendo que ellos, sus hijos, carecían de armas como la de los huincas y viendo la luche desigual, quiso bajar a esas sus tierras para protegerlos...